Audi A5/S5 Información sobre el funcionamiento Conservación y limpieza del vehículo Trabajos de conservación de la parte exterior del vehículo
Una buena visibilidad aumenta la seguridad en la conducción
Para no influir en el comportamiento de las escobillas del limpiaparabrisas (ruidos), los cristales no deberán limpiarse en ningún caso con productos para eliminar restos de insectos o con cera.
Los residuos de goma, aceite, grasa o silicona se pueden eliminar con un producto limpiacristales o con un producto para eliminar silicona. Los residuos de cera, sin embargo, sólo se pueden eliminar con un producto de limpieza especial. El Servicio Oficial Audi está a su disposición para informarle con todo tipo de detalles sobre este particular.
Las ventanillas, el parabrisas y la luneta trasera deberían limpiarse también por dentro con la debida regularidad.
Para secar las ventanillas, utilice otro paño o bien un paño de cuero que sólo se utilice para este fin. El paño de cuero que ha utilizado para secar la superficie de la pintura contiene residuos de productos conservantes que pueden deteriorar las ventanillas.
¡ATENCIÓN!
El parabrisas no debe tratarse con agentes de recubrimiento impermeables al agua para cristales. Bajo condiciones de visibilidad desfavorables como por ejemplo con humedad, oscuridad o cuando el sol se encuentra en su punto más bajo puede que se produzca un deslumbramiento intensificado - ¡Peligro de accidente! Además es posible que las escobillas del parabrisas produzcan ruidos.
¡Cuidado!
- Elimine la nieve y el hielo que pueda haber en los cristales y en los retrovisores exteriores con una rasqueta de plástico. Para evitar que las partículas de suciedad produzcan arañazos al limpiar, la rasqueta no se deberá mover hacia delante y hacia atrás, sino sólo en una dirección.
- Los filamentos térmicos de la luneta se encuentran en la parte interior de la misma. Para evitar cualquier tipo de daños, no se deben pegar adhesivos sobre los filamentos térmicos.
- Nunca retire nieve o hielo de los cristales ni de los retrovisores con agua caliente o muy caliente, pues existe peligro de que se formen grietas en el cristal.