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Válido para vehículos: con Audi adaptive cruise control
Las zonas de los sensores radáricos y de ultrasonidos, así como la de la cámara de vídeo Fig. 1 no deben cubrirse con adhesivos o similares ni permitir que se acumule la suciedad, ya que se puede mermar el funcionamiento del adaptive cruise control y del braking guard. Indicaciones para la limpieza ►Enlace. Lo mismo rige para las modificaciones técnicas en la parte delantera.
La función del adaptive cruise control y del braking guard está limitada en algunas situaciones de la conducción:
- Los vehículos se pueden reconocer cuando han entrado en la zona de detección de los sensores Fig. 2.
- Los vehículos que circulan delante a muy poca distancia, los que no se mantienen en su carril o los que están entrando en el carril no pueden ser detectados por el sistema como es debido.
- Los vehículos difíciles de detectar, p. ej. los vehículos de dos ruedas que circulan por delante, los vehículos con una gran distancia al suelo o bien la carga que sobresale se detectan a menudo demasiado tarde o no se detectan en absoluto.
- Al circular por curvas ►Enlace.
- En caso de vehículos parados ►Enlace.
Preste atención al tráfico, en todo momento, también si el adaptive cruise control o el braking guard están activados. El conductor es el único responsable de poner el vehículo en marcha, de la velocidad del propio vehículo y de guardar la suficiente distancia con respecto a otros automóviles. El braking guard es un sistema de ayuda. El conductor tiene que intervenir siempre que se quiera evitar una colisión. La responsabilidad de frenar a tiempo es siempre del conductor.
- Por motivos de seguridad, el sistema adaptive cruise control no deberá utilizarse en carreteras con muchas curvas o en caso de condiciones meteorológicas o de la calzada adversas (p. ej., en caso de hielo, niebla, gravilla, lluvia fuerte o aquaplaning). De lo contrario existe peligro de accidente.
- Desactive el adaptive cruise control temporalmente si circula por carriles para girar, salidas de autopista o tramos donde hay obras. Así se evita que el vehículo acelere, también en estas situaciones, a la velocidad programada.
- El adaptive cruise control no frena por sí mismo si pone el pie en el pedal del acelerador. Esto puede originar un exceso de regulación de la velocidad y de la distancia.
- Al acercarse a obstáculos inmóviles, como por ejemplo la cola de un atasco, el adaptive cruise control no reacciona y el braking guard reacciona con limitaciones.
- El adaptive cruise control y el braking guard no reaccionan a personas o animales ni a vehículos que se cruzan o circulan en sentido contrario.
- Los objetos reflectantes, tales como guardarraíles o la entrada en un túnel, la lluvia intensa y la formación de una capa de hielo pueden menguar el funcionamiento del sensor radárico.
¡Cuidado!
Los golpes o daños en parachoques, paso de rueda y bajos del vehículo pueden desajustar los sensores. A consecuencia de ello pueden dañarse el adaptive cruise control y el braking guard. Lleve su vehículo a un taller especializado para que revisen el funcionamiento.